Ya que la naturaleza es lo que más me inspira a la hora de trabajar, he querido tenerla presente en la mayoría de mis obras. Los personajes femeninos abundan en mis ilustraciones, así como los animales, formando un vínculo entre ambos. Procuro tener presente la sensibilidad en la mayoría de mis creaciones, algunas acompañadas de cierto misticismo donde la Luna es una protagonista más, podría decirse que incluso representa el papel de una diosa protectora y vigilante, poderosa pero silenciosa, mágica y misteriosa. En cuanto al color, los azules que predominan son pacíficos, transmiten sinceridad, seguridad y confianza. Para mí, el azul es sinónimo de calma, y que, junto con los elementos nocturnos de algunas ilustraciones, se crea un aura de misterio. El azul, a pesar de estar clasificado como un color frío e incluso distante, lo he trabajado para que no denote sensación de frialdad, sino para que evoque calidez, nos inspire y abrace con su magia.